La Tacleada de Voltionautas está de compras en un pueblo costero, donde los clientes hacen fila para tener la oportunidad de comprar la especialidad local: los panes dulces Wiglett. Liko y Rod tienen suerte y reciben una caja tras ayudar al gerente de la tienda que los vende. Pero alguien más tenía la mirada puesta en los panes Wiglett... Coral, de los Exploradores, se queda sin poder comprarlos y tiene un ataque de ira cuando ve a Liko y Rod con una caja. Ella coloca una carta sobre el lomo de Fuecoco y reta a los jóvenes Entrenadores a un combate...