Después de robarle comida una vez más, el Litten salvaje busca a Ash para pedirle ayuda cuando su amigo Stoutland comienza a tener problemas para respirar. Ash hace todo lo posible por llevarlo al Centro Pokémon… pero Stoutland es viejo, y no hay mucho que la Enfermera Joy pueda hacer.
Ash cuida a Litten mientras se lamenta por su querido amigo, e incluso Meowth le ofrece un hombro para llorar. Con el tiempo, un hermoso arcoíris lo ayuda a revivir sus buenos recuerdos, y Litten comienza a sentirse mejor. Ash invita a Litten a unirse a su equipo para seguir el entrenamiento que comenzó con Stoutland y, después de una batalla, Litten acepta. Los recuerdos son recientes, ¡pero Litten tiene una nueva vida por delante!