Liko, Rod y Friede se reúnen en el Centro Pokémon tras huir del furioso Moltres de Galar que estaba en el interior de la Mina de Galar. Tras consultar a Doti por teléfono, sus temores se confirman. Esa forma del Pokémon legendario Moltres es considerada abrumadoramente poderosa cuando está furioso. Rod se plantea si será posible derrotar a ese Pokémon en un combate, pero Liko tiene otra idea: tratar de entender lo que siente. Los Entrenadores intentan apaciguar la ira de Moltres, pero este los ataca, y Arboliva emerge de su Poké Ball ancestral para proteger a Liko. Con la ayuda de Arboliva, Moltres se tranquiliza, pero Liko se sorprende cuando el Pokémon empieza a comunciarse con su colgante.