Aunque casi todos toman por loco a un investigador local, cautivados por sus historias sobre un gigantesco laberinto excavado por un Trapinch en el que estos Pokémon se reúnen en secreto para evolucionar a Vibrava, Ash y sus amigos deciden darle al hombre el beneficio de la duda. Juntos descienden al laberinto, siguiendo un dispositivo de seguimiento que le han puesto a uno de los Trapinch y llevando sin darse cuenta al Team Rocket al refugio de los Trapinch. Estos aspirantes a villanos meten la pata una vez más, pero consiguen dejar a Ash y al guía que les acompaña en un nivel más profundo del laberinto. Por suerte, el Trapinch con el dispositivo sigue con ellos, aunque para escapar Ash y su nuevo acompañante tendrán que atravesar caminos jamás pisados por un humano.