El mundo de Leyendas Pokémon: Arceus no se parece a ninguno que hayas explorado antes. Ambientado en la región de Sinnoh de una época remota, cuando a esta se la conocía como Hisui, las cosas aquí funcionan de manera muy diferente a como lo hacen en otros juegos de Pokémon. En Hisui, la relación entre los humanos y los Pokémon es mucho más compleja, y la falta de avances tecnológicos cambia por completo la forma en la que interactúas con el entorno. En este artículo hemos enumerado algunas de las diferencias que encontrarás al embarcarte en tu aventura por la región de Hisui para evitarte el choque cultural.
Especialista en Pokémon
Quizá el aspecto que más te sorprenda de Hisui es que sus habitantes tratan con cierto recelo (a veces hasta con temor) a los Pokémon. En Villa Jubileo casi nadie abandona los confines de la villa por miedo a cruzarse con algún Pokémon salvaje, algo que dista mucho de la relación tan estrecha que existe a día de hoy entre humanos y Pokémon.
Pero esta excesiva cautela tiene su razón de ser. En los tiempos en los que se desarrolla Leyendas Pokémon: Arceus, Villa Jubileo solo tiene dos años de vida. Y, teniendo en cuenta que algunos Pokémon tienden a atacar a cualquiera que se aventure en su territorio, estos primeros años han supuesto todo un reto. El peligro es innegable, pero tus dotes para combatir y capturar Pokémon demuestran que eres la persona perfecta para unirse a la división de investigación del Equipo Galaxia, que se encarga de estudiar a los Pokémon de la región de Hisui.
Además, una vez que conozcas más de cerca a la comunidad de Villa Jubileo, verás que hay quienes empiezan a interesarse por los Pokémon. Los habitantes más curiosos te pedirán que captures a un Pokémon determinado para mostráselo, mientras que otros necesitarán que les eches una mano para encontrar al que será su compañero Pokémon. En los campos de Villa Jubileo, ya hay incluso humanos y Pokémon trabajando codo con codo. Es muy alentador ver cómo empieza a establecerse una cooperación entre ellos.
La Pokédex analógica
Para consultar cualquier dato sobre los Pokémon, pocas cosas hay más útiles que una Pokédex. Estos aparatos avanzados registran todo tipo de información sobre los Pokémon con los que te cruzas durante tus viajes. En Leyendas Pokémon: Arceus, en cambio, encontrarás una Pokédex completamente diferente. Al comienzo de tu aventura en Hisui, conocerás al Profesor Lavender, cuyo sueño es "crear la primera Pokédex de esta región". Y, como ya hemos mencionado, no hay nadie con mejores cualidades que tú para ayudarlo en esta noble labor.
A diferencia del dispositivo portátil moderno que quizá ya conozcas muy bien, esta Pokédex, o lo que es lo mismo, la primera Pokédex de Hisui, es un simple cuaderno atado con un cordel. Las hojas sueltas que sobresalen por todas partes son una prueba de que el profesor anota rápidamente sus observaciones en cualquier trozo de papel y los va añadiendo al cuaderno para registrar la información más tarde.
Al ser la primera Pokédex de la región, completar cada una de sus entradas conlleva un esfuerzo mayor. Para alcanzar el nivel 10 de progreso de cada entrada de la Pokédex, tendrás que llevar a cabo numerosas tareas, como capturar varios ejemplares de cada especie u observarlos cuando usan un movimiento determinado cierto número de veces. Una vez que lo consigas, podrás leer las entradas completas con las observaciones personales del Profesor Lavender.
Las entradas incluyen ideas del profesor sobre el comportamiento de los Pokémon o consejos sobre cómo interactuar con ellos. Estas tareas minuciosas y pequeños detalles personales te harán sentir como toda una pionera o pionero en el estudio de los Pokémon.
Fabrica tus propias Poké Balls
Las Poké Balls son el instrumento más valioso para los Entrenadores Pokémon. Sin un buen cargamento de ellas, la tarea de capturar Pokémon sería mucho más complicada. Las Poké Balls se crearon para aprovechar la habilidad de todos los Pokémon de volverse diminutos, ya que pueden entrar dentro de ellas sin ningún problema. A día de hoy, la producción de Poké Balls se lleva a cabo en fábricas como la que se encuentra a las afueras de Ciudad Romantis, en la región de Kalos. Pero en la época de la región de Hisui, este instrumento es un invento muy reciente.
Como no sobran Poké Balls precisamente, tendrás que encargarte de fabricarlas por tu cuenta si quieres poder continuar con tu investigación. Por suerte, se pueden elaborar a mano con Bonguris y Guijarros Rojos, materiales que encontrarás fácilmente en la región de Hisui. Podrás aprender a usar otros materiales, como Pepitas de Hierro y Guijarros de distintas clases, para crear nuevos tipos de Poké Balls. Con el tiempo, los mercaderes también comenzarán a venderlas, con lo que te ahorrarás el trabajo de tener que fabricarlas constantemente. De todas formas, es buena idea llevar siempre algunos materiales contigo por si te topas con Pokémon en tus viajes y no te quedan muchas Poké Balls.
Y recuerda que, al ser un instrumento tan nuevo, la gente de Hisui aún tiene que aprender a usarlas del modo correcto. Tu habilidad con este objeto tan curioso les vendrá de perlas al Profesor Lavender y al Equipo Galaxia.
En el redil como en casa
¿Has capturado más Pokémon de los que puedes llevar? No te preocupes, siempre puedes pasar por un Centro Pokémon y dejarlos en una de las cajas del PC. Oh... espera. En la región de Hisui, no existen aún los Centros Pokémon... ¡por no hablar de sus cajas!
¿Qué hacen entonces los Entrenadores con todos esos Pokémon a los que no quieren liberar pero que no pueden llevar consigo? Villa Jubileo tiene la solución perfecta: los rediles. Estos pastos frondosos funcionan del mismo modo que las cajas del PC modernas, excepto por que, en vez de estar en un ordenador, tus Pokémon descansarán al aire libre en estas áreas cercadas cuando no te acompañen en tus viajes.
Podrás acceder a los rediles si hablas con Cebastiana, la aldeana que se ocupa de ellos en Villa Jubileo, o bien con alguno de los miembros del Equipo Galaxia que se encuentran en los campamentos base. Al principio, solo tendrás acceso a algunos rediles, pero conforme captures Pokémon, irás descubriendo otros donde dejar a tus Pokémon a sus anchas.
Intercambios a propulsión
Al igual que ocurre con las cajas del PC, el intercambio de Pokémon en nuestros días es cosa de tecnología punta. Cuando intercambias un Pokémon con otro Entrenador o Entrenadora, se producen destellos de luz o se ven las Poké Balls viajando por un intrincado sistema de tuberías para llegar a su destino. Puede que en la región de Hisui el método de intercambio no sea tan avanzado, pero no por ello es menos impresionante.
Las Poké Balls antiguas cuentan con una pequeña luz que se ilumina cuando consigues atrapar un Pokémon. Cuando inicias un intercambio con una de ellas, la pequeña luz se va volviendo más potente hasta convertirse en una especie de cohete que lanza la Poké Ball por los aires. Las dos Poké Balls que participan en el intercambio se cruzan en su trayectoria antes de alcanzar su destino.
La estela del cohete hace que la Poké Ball vaya descendiendo lentamente y aterrice con suavidad antes de que la llama se extinga. ¡Como ves, la ingeniería de estas primeras Poké Balls no es moco de pavo!
La vida en la región de Hisui puede parecer primitiva si la comparamos con lo que habíamos conocido hasta ahora del mundo Pokémon, pero no podemos negar que ver a los humanos y los Pokémon interactuar en aquella época tiene un encanto especial. Es muy emocionante poder contribuir a las primeras etapas del estudio de Pokémon y ver cómo se forjó el vínculo tan estrecho que hoy día existe entre humanos y Pokémon.