Nuestros héroes han llegado a la Isla de la Cosecha, famosa por sus deliciosas bayas y por el Gran Festival de la Cosecha que se celebra ahí. Ash, Iris y Cilan parten hacia el festival y por el camino, se encuentran con un Pokémon que nunca habían visto antes, ¡uno que el Pokédex de Ash no puede identificar! Ash, por supuesto, sólo quiere atraparlo, pero cuando lo desafía a una batalla, la descarga eléctrica de su cuerpo lo tira al suelo, y su Entrenadora rápidamente corre a disculparse.
Ella se presenta como Alexa, una Reportera Pokémon de la lejana Región Kalos. Junto con sus Pokémon Helioptile y Gogoat viaja alrededor del mundo para realizar su trabajo, fotografiar y escribir acerca de los Pokémon en sus hábitats naturales. Helioptile, quien derribó a Ash, la ayuda recargando su equipo, y Gogoat lleva ese equipo en sus alforjas y le recuerda dónde está guardado, algo en lo que Alexa no es muy buena.
Alexa ha ido a la isla para cubrir la competencia de Sumo Pokémon en el festival, así que todos deciden caminar juntos hasta allí. En el camino, ella les cuenta a nuestros héroes la leyenda que rodea a la competencia: hace mucho tiempo, la isla estaba en peligro de quedar estéril porque las personas y los Pokémon habían acabado con casi todas sus bayas. Los dos Pokémon más fuertes de la isla lucharon uno contra el otro hasta quedar exhaustos sobre la última baya restante, y las cosas parecían sombrías… Pero un pequeño niño recogió la baya y la partió en dos, ofreciéndole una mitad a cada Pokémon y diciéndoles que debían compartir. La isla se recuperó, y hoy en día, la competencia de Sumo Pokémon conmemora esa feroz batalla.
Ash, Iris y Cilan deciden entrar a la competencia, y mientras están esperando a que comience, Ash tiene un enfrentamiento con un chico malcriado llamado Rodney, quien lo hace a un lado en el puesto de tartas. Resulta que Rodney también ha entrado a la competencia con su enorme Golurk, el cual despacha rápidamente a sus oponentes. Pero Ash y Pignite están decididos, y Rodney gradualmente comienza a mostrar respeto por la persistencia de ese par. Finalmente, tras algunas maniobras astutas, Pignite consigue hacer perder el equilibrio a Golurk y lanzarlo al suelo. ¡Y Ash gana!
Rodney está decepcionado, pero Ash le ofrece dividir la baya con él, como un eco de la vieja leyenda. Hay suficientes bayas para alimentar a todo el festival, y todos se unen alegremente. Después de esto, nuestros héroes están listos para abordar el barco nuevamente cuando se enteran de que Alexa se dirige hacia Kanto para trabajar en su próximo artículo. Así que ella se les unirá en sus viajes.